Una empresa puede recibir cientos de currículums de candidatos tras publicar una oferta de empleo. Debido a este gran número de solicitudes y a medida que las nuevas tecnologías se integran en el proceso de selección y contratación de nuevos empleados, cada vez es más habitual que las empresas pidan a los candidatos que les envíen un vídeo de presentación laboral junto al currículum cuando solicitan el empleo. Estos vídeos permiten a los responsables de la contratación analizar a los candidatos con mayor detenimiento y hacerse una idea de su personalidad y creatividad, además de sus habilidades y experiencias.
¿Necesitas hacer un vídeo de presentación laboral y no sabes por dónde empezar? En este artículo descubrirás en qué consisten este tipo de vídeos, qué deben incluir y, en definitiva, cómo crear un vídeo que te represente eficazmente.
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Descargar prueba gratuitaCómo hacer un vídeo de presentación laboral en cinco pasos
La idea de crear un vídeo de presentación laboral puede resultar abrumadora, no solo en lo que respecta a qué decir, sino también a cómo actuar ante la cámara y a los aspectos técnicos que hay que tener en cuenta.
Sin embargo, piensa que también es una oportunidad de promocionarte y demostrar tu capacidad de comunicación y tu talento creativo de una forma que no es necesariamente posible a través de un currículum tradicional.
Además, te ofrece un nivel de control increíble sobre la primera impresión que la empresa tendrá de ti: puedes tomarte tu tiempo para prepararla, evitas el estrés añadido de interactuar en persona y, si te equivocas, ¡solo tienes que volver a grabar la toma!
Ahora que ya sabes que los vídeos de presentación tienen su lado bueno, veamos cómo hacer uno que impresione a los empleadores en tan solo cinco pasos.
Paso 1: Planifica antes de grabar
Antes de empezar a grabar, considera las necesidades de la empresa y del puesto, y plantéate cómo puedes mostrar que respondes a ellas a través del vídeo. Del mismo modo que adaptarías un currículum a una oferta de empleo, debes asegurarte de que tu vídeo se ajusta al puesto al que aspiras.
Piensa en qué formato de vídeo es el más adecuado para la empresa, para el puesto y para ti. Aunque, en la mayoría de los casos, con un vídeo sencillo grabado con un teléfono o un ordenador en el que hables ante la cámara es suficiente, tienes muchas más opciones. Piensa de forma creativa y busca la que te resulte más natural. Por ejemplo, puedes probar a dar al vídeo un formato de «entrevista», respondiendo a preguntas que consideres relevantes. O hacer una presentación de diapositivas con una narración en off o un vídeo visualmente creativo en el que no aparezcas en absoluto. Todo depende de cómo quieres que te perciban los empleadores y de lo que creas que están buscando.
Qué decir en un vídeo de presentación laboral
Algunas empresas pueden mencionar directamente los puntos que quieren que abordes en el vídeo de presentación, pero no suele ser los más habitual. Lo normal es que tú tengas que decidir lo que vas a tratar.
El contenido de un vídeo de presentación depende del puesto de trabajo y del sector, pero en general debe incluir lo siguiente:
- Una presentación inicial breve y convincente que ayude a los empleadores a hacerse una idea general de quién eres.
- Tus habilidades y experiencias, adaptadas al puesto que solicitas.
- Tus logros cuantificables (céntrate en aquellos que puedan ayudarte a destacar).
Reflexiona sobre las principales ideas que quieres transmitir. No te limites a recitar tu currículum escrito: el objetivo de la presentación en vídeo es complementarlo, no sustituirlo. Plantéate cuál es la información que más le puede interesar a los empleadores, por ejemplo, por qué te interesa trabajar en la empresa, por qué tus habilidades o experiencias son las más adecuadas para el puesto, qué valor puedes aportar a la organización, qué puedes hacer por el equipo, etc.
Paso 2: Escribe el guion
Una vez tengas claro lo que quieras decir, escribe un guion para darle forma. Esto te ayudará a que el vídeo quede más profesional y a no desviarte del tema.
Empieza por esbozar los puntos que quieres tratar y a partir de ese esquema escribe un guion completo palabra por palabra. Si no te apetece escribir un guion completo, al menos haz una lista de los puntos que vas a tratar y apunta algunas frases que te ayuden a exponer tus ideas claramente.
Contar con un guion palabra por palabras también te ayudará a no extenderte demasiado. Procura que la duración total de tu vídeo sea inferior a los tres minutos. Ya tendrás tiempo más adelante para entrar en detalles.
Es posible que los empleadores no tengan tiempo de ver enteros todos los vídeos de presentación que reciben, así que es importante causar una buena impresión lo antes posible para que acabe el tuyo o, al menos, lo recuerde. Empieza presentándote y resume en una o dos frases por qué eres la mejor persona para el puesto. Luego, en lugar de enumerar tus cargos y responsabilidades anteriores, aprovecha la oportunidad para centrarte en las experiencias o habilidades que tengan especial relevancia para el puesto, o en aspectos que quizá no queden totalmente reflejados en tu currículum.
Otra de las ventajas de tener un guion es que te da la oportunidad de practicar antes de grabar, lo que implica que es menos probable que cometas errores. Lee el guion en voz alta varias veces antes de grabar y presta atención a las palabras o frases que te resulten difíciles de pronunciar. Luego, ajusta el guion según sea necesario antes de empezar a grabar.
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Descargar prueba gratuitaPaso 3: Prepara el espacio de grabación
No te agobies a causa del equipo: no necesitas comprar o alquilar una cámara y un micrófono para grabar un vídeo de presentación. Puedes hacerlo con tu teléfono móvil (aunque necesitarás un trípode o a un amigo que te ayude) o cámara web de tu ordenador.
Lo más importante es grabar en el lugar adecuado: es imposible causar una buena impresión si en el vídeo no se te ve ni se te escucha.
Busca un espacio bien iluminado, en interiores y con el menor ruido de fondo posible. Es fundamental que el lugar que elijas sea lo más silencioso posible.
Asegúrate de que el espacio que aparece detrás de ti en el vídeo esté ordenado y despejado. Nunca te pongas de espaldas a una ventana, o aparecerás como una sombra. Aprovecha esta fuente de luz natural posicionando la cámara de forma que la luz incida sobre ti como iluminación lateral.
Luego, sitúa la cámara a la altura de tus ojos, para que el vídeo quede natural.
Por último, haz una prueba para comprobar que el vídeo se ve y se escucha bien.
Paso 4: Graba el vídeo
Aunque es importante que sepas lo que vas a decir en tu vídeo, no debe parecer que estás leyendo directamente de un guion, así que ensaya de antemano. Practicar dos o tres veces antes de grabar te ayudará a encontrar el ritmo adecuado y a hablar con una mayor fluidez.
Cuando te sientas con confianza, graba el vídeo. Asegúrate de hablar claro y despacio, sonreír y mostrar tu personalidad. Si pronuncias mal una palabra o te equivocas, o se escucha un ruido inesperado en el vídeo, haz una pausa y empieza de nuevo desde el punto inmediatamente anterior al error. Es muy fácil recortar esos segundos más adelante con un programa de edición de vídeo.
Ten en cuenta tu lenguaje corporal al grabar. Evita cruzarte de brazos o moverte mucho, ya que quieres presentarte como una persona segura y receptiva. Dirígete a la cámara de modo que mantengas el contacto visual, como harías en una entrevista en persona.
Cuando termines, si el resultado general no te convence, no lo dudes y graba el vídeo de nuevo hasta que te satisfaga por completo.
Consejo profesional: tu forma de vestir en el vídeo debe reflejar el puesto que solicitas, así que elige un atuendo que llevarías en una entrevista cara a cara.
Paso 5: Edita el vídeo
Ahora viene lo mejor: ¡editar el vídeo! A diferencia de lo que ocurre cara a cara, los vídeos te permiten corregir tus errores para mostrar siempre tu mejor versión. ¿Nunca antes has editado un vídeo? ¡No hay problema! El editor de vídeo de arrastrar y soltar de Camtasia es superfácil de usar y simplifica mucho el proceso.
Empieza por abrir un nuevo proyecto en Camtasia e importar tu vídeo. Para importar un vídeo para editar en Camtasia, solo tienes que hacer clic con el botón derecho sobre el Contenedor de medios y seleccionar Importar medios…
Cuando tu vídeo de presentación laboral esté en el Contenedor de medios, arrástralo y suéltalo sobre la línea de tiempo de Camtasia para poder editarlo.
A continuación, corta el vídeo para quitar todo el material que no quieres que se vea, como las secuencias con errores, o los primeros y los últimos segundos del vídeo. Si el vídeo es demasiado largo (recuerda que no debe superar los tres minutos), puedes eliminar las partes menos relevantes.
Para cortar fragmentos del vídeo, solo tienes que seleccionar las partes que deseas eliminar con los tiradores verde y rojo del cabezal de reproducción y hacer clic en icono de las tijeras. No te preocupes si cortas demasiado, puedes deshacer la acción.
Una vez termines de editar el vídeo, guarda el archivo en tu ordenador haciendo clic en Exportar y seleccionando Archivo local en el menú desplegable.
La edición de vídeo es todo un mundo, y la función de cortar es solo una de las muchas herramientas que Camtasia pone a tu disposición. Para mejorar aún más tu vídeo de presentación, puedes subir el volumen de la pista de audio, girarlo e incluso añadirle texto o música de fondo. Si tienes tiempo y te apetece impresionar a los reclutadores, echa un vistazo a nuestra guía de edición de vídeos para principiantes o explora los tutoriales de Camtasia aquí.
Además, Camtasia no solo es un herramienta de edición de vídeo, sino también un potente software de grabación. Si dispones de una buena cámara web externa, prueba a grabar tu vídeo de presentación directamente con Camtasia.
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Descargar prueba gratuitaConclusión
Los vídeos de presentación laboral permiten a los empleadores hacerse una idea de la personalidad de los candidatos y de si estos encajarían en la cultura de la empresa. Esperamos que este artículo te ayude a crear un vídeo de presentación profesional que ofrezca a tu posible empleador una imagen clara de quién eres, lo que sabes hacer y todo lo que puedes aportar.